domingo, 8 de noviembre de 2009

VIOLETA PARRA

Nadie debe considerar una falta de respeto ni sentirse afectado porque alguien afirme que el folklore de Chiloé desde hace unas décadas hasta hoy ha perdido consistencia y validez, ha sufrido un retraso que se nota en la abundancia de ritmos cadenciosos como rondas infantiles, a los que se agrega la carencia de variedad y falta de contenido y originalidad en las letras de las nuevas creaciones.
Existe un abismo de diferencia con los temas de folklore chilote creados por Violeta Parra, icono que debiera ser estudiada y revalorizada, por alguien entre toda la abundante selva de folkloristas que aparecen cada verano por estas islas.
Placido Nancuante, artesano constructor de botes, oficio antiguamente conocido como "Carpintero de Ribera".

En el tiempo histórico cuando Violeta Parra anduvo por estos archipiélagos, esta era una región deprimida económicamente, no existían industrias. Los hombres y las mujeres que se atrevían emigraban a la Patagonia, Argentina y Chilena, para el chilote no había frontera. Quien se quedaba sobreviviendo en estas islas comerciaba mariscos, carbón, el alerce y la leña. De esa vida precaria hablaba Violeta Parra en: SEGÚN EL FAVOR DEL VIENTO; un vals que describe la pobreza del chilote isleño que en su lancha velera llegaba hasta Angelmo, en Puerto Montt o hasta Castro, o Ancud, en Chiloé, a vender el producto de su trabajo, o a cambiarlo por azúcar, harina, café, ropa, zapatos y otros bastimentos en los almacenes. En un trueque usurario que seguía manteniendo a los chilotes en una pobreza cotidiana pero con la dignidad de hombres o mujeres amables, y educados con tradiciones de solidaridad y resignación.

SEGÚN EL FAVOR DEL VIENTO

Según el favor del viento
va navegando el leñero
atrás quedan las rucas
para adentrarse en el puerto
corra sur o corra norte
la barquichuela gimiendo,
llorando estoy.
Según el favor del viento
me voy, me voy.

Del norte viene el pellín
que colorea en cubierta
habrá de venderlo en Castro
aunque la lluvia esté abierta
o queme el Sol de lo alto
como un infierno sin puertas,
llorando estoy
o la mar está revuelta
me voy, me voy.


En un rincón de la barca
está hirviendo la tetera
a un lado pelando papas
las manos de alguna isleña.
Será la madre del indio la hermana o la compañera, llorando estoy
Navegando lunas enteras
Me voy, me voy.

No es vida la del chilote
no tiene letra ni pleito
tamangos lleva en sus pies
milkao y ají en su cuerpo
pellín para calentarse
el frío de los gobiernos, llorando estoy
que le quebrantan los huesos
me voy, me voy.



Despierte, el hombre despierte
despierte por un momento
despierte toda la patria
antes que se abran los cielos
y venga el trueno furioso
con el clarín de San Pedro, llorando estoy
y borra los misterios
me voy, me voy.

Quisiera morir cantando
dentro de un barco leñero
y cultivar en sus aguas
un libro más justiciero
con letras de oro que digan
no hay patria para el isleño, llorando estoy
Ni viento pa´su leñero
Me voy, me voy.