

Hace sesenta años, la Unión Soviética detonó su primera arma nuclear, llamada "Primer Rayo", en una instalación de ensayo en la estepa del noreste de Kazajstán (antigua República Socialista Soviética de Kazajstán). El lugar del ensayo, llamado el Polígono de Semipalatinsk, pasaría a acoger más de 456 explosiones atómicas en sus 40 años de existencia. Los residentes en los alrededores se convirtieron en involuntarios conejillos de indias, expuestos a las secuelas de las bombas nucleares, tanto no intencional como premeditada y conocida. La radiación silenciosamente ha devastado tres generaciones de personas en Kazajstán - el número total de afectados se cree es más de un millón - los problemas de salud van desde enfermedades de la tiroides, cáncer, malformaciones congénitas, deformidades, envejecimiento prematuro, y enfermedades cardiovasculares. La esperanza de vida en la zona es siete años menos que el promedio nacional de Kazajstán. Fotógrafo Ed Ou amablemente ha compartido estas fotos de la zona, gracias al excelente Reportaje de Getty Images. (Total de 25 fotos)
Imagenes tan impactantes que no se recomienda ver a personas muy impresionables. Un ejemplo del egoismo humano y del poder de destrucción de las guerras no declaradas. Tuvieron que pasar más de veinte años para conocer la cara oculta de la Unión Sovietica.
http://www.boston.com/bigpicture/2009/11/kazakhstans_radioactive_legacy.html